Sus primeros
pasos
Tal y como predominaría hasta el siglo XX,
el tema de las diferencias individuales va a estar muy vinculado a la
orientación educativa. En este sentido, las primeras noticias que se tiene
sobre este tema se remontan a la Grecia antigua. En principio, Platón (427-347
A.C.) señalaba la importancia que tenía la especialización del trabajo, así
como la selección profesional de los hombres. Por lo tanto, propuso que los
ciudadanos fueran divididos en tres clases, artesanos, guerreros y gobernantes,
de acuerdo a sus diferencias individuales. Por otro lado, Aristóteles (384-322
A.C.) señaló que las diferencias naturales convertían a las personas en libres
o esclavas, por lo que se debería tener cuidado en su selección. Un poco más
adelante, Cicerón (104-43 D.C.), filósofo romano comentó la importancia de
establecer las diferencias entre personas en cuanto a sus intereses, creencias,
habilidades, conocimientos y carácter.
Ya
entrada la era cristiana, Quintiliano (35 D.C), educador romano, propuso que
los maestros adaptaran la instrucción a las diferencias individuales de sus estudiantes.
Por su parte, Alcuino (735-804), asesor educativo de Carlos Magno, desarrolló
un sistema de méritos para designar a los mejores clérigos para ocupar los más
altos cargos eclesiásticos. Con el advenimiento de la Edad Media (época obscura)
poco se sabe en lo general sobre el desarrollo del pensamiento del hombre. La educación
estaba asociada a la enseñanza de la palabra de dios en conventos y
monasterios, por lo que las diversas actividades profesionales estaban
asociadas a la enseñanza de los novicios o novatos por parte de los maestros o
expertos de la época, ya sea en la milicia, las artes, o los diferentes oficios.
Por lo general los padres se encargaban de transmitir los conocimientos que sus
padres y abuelos les habían enseñado. Los hijos (principalmente varones) sabían
que tenían que desarrollar el oficio de sus padres, por lo que desde pequeños
eran entrenados para llevarlo a cabo. Por su parte, las niñas eran entrañadas a
llevar a cabo las labores del hogar, para posteriormente casarse y tener hijos.
Pocas eran las actividades femeninas que estuvieran fuera de las labores del
hogar o la crianza; para aquellas que tenían otra suerte por lo general la
única opción era la vida monástica una de las pocas opciones que les esperaba.
Surgen los primeros
educadores
Los años oscuros de la edad media empiezan a
ceder; a partir del siglo XIV se tiene noticias de la idea vanguardista de
educadores de la talla del alemán Guarino de Verona (1370-1460), así como del
italiano Vittorino Da Feltre (1378-1466), quienes junto con Erasmo (1466-1536),
coinciden en señalar que los alumnos difieren en sus intereses y su capacidad
de aprender. Nuevamente las diferencias individuales empiezan a ser
consideradas como parte fundamental del desarrollo del hombre. Esto empezara a
preparar el terreno a los años venidos, en donde el estudio de la educación se
formalizará. Es a finales del siglo XVI en que el médico español Juan Duarte de
San Juan, escribe una obra que para muchos es considerada como el primer
tratado de orientación educativa, el cual se tituló “Examen de ingenio para las
ciencias”, escrito en (1575), en el cual el autor enfatiza la importancia de
las diferencias individuales y las aptitudes de las personas.
La segunda mitad del siglo
XX.
Después de dos guerras mundiales, junto con
el florecimiento de la denominada psicología científica, la psicometría, o
desarrollo de pruebas psicológicas, fortalecen la teoría de las diferencias
individuales, así como el reconocimiento e identificación de las mismas.
Se conforman diversas “baterías” de pruebas,
dentro de las cuales destacan algunas de inteligencia, otras de intereses vocacionales,
así como algunas otras para identificar rasgos de personalidad de los aspirantes.
Las escuelas se ven influenciadas por este movimiento, por lo que los
profesores aprenden técnicas para desarrollar pruebas escolares de acuerdo a
sus necesidades, pero al mismo tiempo surge la necesidad de contar con especialistas
encargados de evaluar estudiantes con cierto tipo de dificultades escolares,
por lo que la figura del orientador escolar se ve fortalecida al mostrar que es
capaz de aplicar estos instrumentos en diversos entornos.
En
esta segunda parte del siglo destaca la obra de Eli Ginzberg, quien en 1951
publica su libro “Ocupational Choice”. Otros acontecimientos que dejan huella
en los años cincuenta y sesenta tiene que ver con el lanzamiento del Sputnik
soviético, iniciando la carrera espacial entre estados Unidos y la extinta Unión
Soviética, en el primero, un movimiento educativo nacional con la intención de
rescatar a sus niños más sobresaliente, dando pauta a una reforma educativa en
la que sobresalen un cambio en la enseñanza de habilidades cognitivas, físicas,
artísticas y sociales en las escuelas públicas estadounidenses. Esto
repercutirá en todo el mundo, y por consiguiente dentro del campo de la
Orientación. Ya para la década de los setenta se introducen otros cambios en el
sistema educativo mundial, principalmente dentro de la educación básica, como
la enseñanza de los idiomas, el favorecimiento de la paz, la democracia y la educación
sexual. En la década de los ochenta aparece el “boom” del video en las
escuelas, la computación como herramienta de trabajo, y la ecología como un
tema de moda. En la última década del siglo XX se enfatiza el desarrollo de
habilidades del pensamiento, se reconoce la importancia de la participación de
los padres en la escuela, y surge una nueva herramienta electrónica denominada
internet. Todo esto transforma radicalmente la función, orientación y perfil
del Orientador Educativo. Una nueva era se avecina para esta actividad
profesional.
Los antecedentes de la
Orientación Educativa en México.
Se podría afirmar que el inicio de la Orientación
Educativa en nuestro país surge cuando Rafael Santamaría y Cols traducen en
1916, del inglés al español, la escala de inteligencia Binet-Simon; en 1921 presentaron
la primera adaptación para niños mexicanos. Habrá que recordar que en 1921 se
fundó lo que hoy es la Secretaría de Educación Pública (SEP) al frente de José
Vasconcelos. En esta época se desecha la educación positivista apoyada por
Justo Sierra. Surgen campañas masivas en contra del analfabetismo y se
introduce el concepto de Maestro rural; se buscaba fortalecer la identidad
mestiza y la afirmación de la vocación latinoamericana. Alrededor de estos mismos
años, Lauro Aguirre (1924) creó la sección psicopedagógica en el Departamento
Escolar en la SEP. En 1926 se funda el tribunal para menores, en donde se le
dio gran importancia a la aplicación de pruebas psicológicas las de
Binet-Simon, Khos, Raven, y la Escala Gesell. Lucia Montana, alumna del
psicólogo conductista Thorndike, aplica en 1926 en escuelas secundarias del
Distrito Federal la prueba de inteligencia Army- Beta.
En
tiempos de Plutarco Elías Calles se introduce el Modelo de las Escuelas Gary,
de Indiana (USA); se introduce el entrenamiento profesional para ampliar, conservar
y embellecer las instalaciones de la propia escuela. Se le dio un gran impulso
a la Educación Tecnológica, en donde aparece una tendencia utilitarista de la
educación para ayudar a resolver la crisis económica de 1929 a 1933.
Narciso
Bassols creó en la época de Cárdenas el IPN, en donde se fundan las escuelas
vocacionales.
Años
más tarde surge en México el llamado Plan socialista, con antecedente de la doctrina
marxista. Se acepta la necesidad de educar al pueblo, dándole los elementos
para su defensa y liberación.
Posteriormente,
y como respuesta al plan anterior nace con Jaime Torres Bodet como Secretario
de Educación Pública, el Proyecto de la Unidad Nacional. Con Ávila Camacho al
frente, Torres Bodet recibe la encomienda de proponer el artículo tercero de la
constitución mexicana, proponiendo una educación integral, democrática, laica y
nacionalista.
Durante
de la década de los años cincuenta, la Orientación Educativa sigue su camino.
En 1952 Luis Herrera y Montes establece la oficina de Orientación Educativa,
dependiente del subsistema de secundarias federales. Las universidades
mexicanas inician por su cuenta una gran actividad al respecto.
La segunda mitad del Siglo
XX
Durante la década de los sesenta se crea una
comisión especial de orientación profesional dentro del Consejo Nacional
Técnico de la Educación, en donde se establece la formación de orientadores dentro
del Magisterio, con 4 años de especialización en psicología y un curso
intensivo de 6 meses en orientación.
Casi
al mismo tiempo, Guillermo Ruelas funda en 1962 el Departamento de Orientación
en la UNAM, mientras que Antonio Pedroza crea en 1964 el servicio de
orientación en la Universidad Autónoma de Morelos. Por su parte, Agustín Yáñez,
como Secretario de Educación Pública funda en 1966 el Servicio Nacional de
orientación Vocacional. A fines de esta década se forma el Servicio Orientación
en la Dirección General de Secundarias Técnicas. A lo largo de esta década surgió
dentro de la Orientación Educativa en México el llamado “Modelo Científico”, en
el que medir era la principal consigna. En esto años proliferó el uso de
instrumentos psicométricos (tests) y fue
muy bien vista la visita de Karl Hereford, quien vino a enseñar estadística
psicométrica, siendo el desarrollador de la primera prueba mexicana de
intereses vocacionales.
Por
su parte, la UNAM, el IPN, y la SEP,
organizan la formación de la Asociación Mexicana de Profesionales de la Orientación en 1978, la
cual sigue estando vigente hasta nuestros días.
En
esta misma década se generó el llamado Proyecto Modernizador de la Educación.
Fue en el sexenio de Luís Echeverría cuando se promulgó la Ley Federal de
Educación; su objetivo era “transformar la economía, las artes y la cultura,
por medio de la modernización de las mentalidades”. Se apoyó fuertemente el
aprendizaje de tipo cognoscitivo. Víctor Bravo Ahuja incluyó la y modificación
de planes y programas, así como los libros de texto de primaria. Se enfatizó el
Aprender a Aprender.
En
los años ochenta surge el “Modelo Desarrollista”, en el que se vincula a la
orientación vocacional con la psicología social. En 1988 se funda la Federación
de Asociaciones y Profesionales de la Orientación de América Latina. En esta misma
década la Universidad Autónoma de Tlaxcala ofrece su Maestría en Orientación
Educativa.
Los últimos años
Ya en los noventa surge el Acuerdo Nacional de Modernización de la Educación
Básica, apareciendo en la Ley General de Educación. Con esto se buscó
descentralizar la educación básica y normal, además de reforzar la preparación
del maestro, reestructurar planes y programas, reelaborar libros de texto e
introducir evaluaciones externas. El Presidente Salinas, a través del
Acuerdo Nacional para la Modernización de la
Educación Básica plantea conceptos y
procesos teóricos y prácticos nuevos dentro de la orientación educativa. Cobra
fuerza la orientación educativa comunitaria, en donde se reconoce cada vez la
importancia de la participación de la familia. Se reconoce el trabajo
multidisciplinario dentro del proceso orientador. Lo anterior no duró mucho, ya
que durante el sexenio del Presidente Zedillo aparece el Plan Nacional de
Desarrollo, desapareciendo las llamadas plazas
de profesores orientadores, dándole lugar a la asignatura de cultura cívica y
ética.
Miguel Ángel López Carrasco (2005)
Referencias.
López Carrasco, Miguel Ángel (1991). El psicologísmo dentro de la
práctica cotidiana del orientador educativo. Diorama Educativo, No. 3, 36-40.
Meneses, E. (1999). Las enseñanzas de la historia de la educación en
México.
México: Umbral
XXI/UIA.
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